Elogio a la sencillez es lo primero que me viene a la cabeza cuendo pienso en la visita que hemos recibido estos días. Y es que pasa con frecuencia, nos cruzamos con personas cada día, en un momento u otro, nuestros caminos se entrelazan y sólo depende de nosotros que este cruce tome cierta distancia o surja, inesperada, cierta relación. llevo más de 20 años teniendo presente los modelos, el modelar, el aprender acerca de las distinciones que hacen que una o más personas consigan un resultado por encima de la media en un campo específico. Casi siempre esto está asociado a contextos empresariales y profesionales. Pero no todo es el trabajo, la vida es mucho más que trabajar, y fuera del contexto profesional hay muchos modelos de los que podemos aprender.

Hoy es un día especial porqué ayer lo fue más. Ayer tuvimos una visita. Nos visito la sencillez y la nobleza, la templanza y la naturalidad de un amigo. Poco tiempo tuvimos, pero los minutos estuvieron bien aprovechados. El tiempo se acortaba y el viaje esperaba incesante a que su viajero lo retomara. Aún así, ese encuentro fue vivificante, mágico e intenso.

Hay personas con las que conectas y parece que ese hilo que une no entienda de fronteras temporales-espaciales. Hay personas que se cruzan en nuestros caminos y que deseas tener cerca. Personas que sin pretenderlo, enseñan por sus actos, no por sus palabras, y dejan huella.

¿Qué me llevo?

Es dificil describir que te llevas cuendo pasas tiempo con alguien así. Nos conocemos hace mucho tiempo, y cualquier palabra que utilice está muy lejos de describir el intercambio que se produce cuando estás con alguien a quien admiras. Estas son algunas cosas que  siento que me llevo del rato que pasamos juntos. Otras muchas, me las quedo para mí.

1. Simplicidad: la simplicidad de estar, sin más. Nos empeñamos en hacer, ofrecer, mostrar y nos olvidamos de lo realmente importante… estar.
2. Respeto: respetar al que habla, respetar las ideas, respetar las decisiones. Respetar sin imponer.
3. Agradecimiento: no sólo con palabras, con un abrazo interminable, con el gesto de aceptar un regalo… agradecer de persona a persona.
4. Sencillez: la grandeza de la sencillez radica en su propio significado: “calidad de sencillo…Natural, espontánea, que obra con llaneza.” Un amigo que comunica directamente, con  palabras sencillas, sin tecnicismos, de tú a tú.

¡Gracias! Gracias por el encuentro amigo.

Ayer fue uno de esos días en los que el corazón le envió una orden al cerebro: “Guarda a buen recaudo cada instante, cada palabra, cada sensación… Acuérdate porque en algún momento te pediré que me la devuelvas”.